La producción petrolera de Venezuela corre el riesgo de retroceder si Estados Unidos endurece las sanciones contra Caracas, según el experto Luis Oliveros. La suspensión de licencias a empresas extranjeras es una amenaza inminente tras las recientes declaraciones de Washington.
Riesgo para la producción petrolera venezolana
Ante las declaraciones del secretario de Estado, Marco Rubio, de revisar las licencias a empresas como Chevron, la producción petrolera de Venezuela podría caer entre un 25% y un 30%, llegando al nivel más bajo en 29 meses, advierte el economista Oliveros.
- Trump asegura que EE.UU. no necesita petróleo venezolano y probablemente dejará de comprarlo.
- La suspensión de licencias a Chevron y Repsol reduciría los ingresos y aumentaría la volatilidad cambiaria.
- Expertos estiman que la producción caerá a unos 644.700 barriles por día, desde los 921.000 del año pasado.
La producción venezolana ha experimentado un crecimiento del 17,6% el año pasado, pero las sanciones podrían revertir esta tendencia.
«Un eventual cese de operaciones de las empresas extranjeras se traduciría en menos ingresos en divisas para el país, volatilidad cambiaria y aceleración de la inflación.»
Luis Oliveros, economista
Situación actual y amenazas desestimadas
La producción petrolera venezolana ha experimentado mejoras significativas en los últimos años, alcanzando casi un millón de barriles por día en diciembre pasado. Sin embargo, las amenazas de embargo y la posible suspensión de licencias ponen en riesgo esta recuperación.
A pesar de las declaraciones del presidente Maduro, quien estima que el país puede alcanzar los 1.500.000 barriles diarios, los expertos advierten sobre las consecuencias negativas de la crisis que afectaría tanto a la economía como a los puestos de trabajo generados por las empresas extranjeras.
«Un cambio en el panorama de licencias y sanciones tendría un impacto significativo en la producción petrolera venezolana y en la economía del país.»
Luis Oliveros, economista
La situación en Venezuela sigue siendo incierta, pero es evidente que las decisiones tomadas por Estados Unidos tendrán un impacto directo en la producción petrolera y en la economía del país caribeño.