La unidad minera Pierina, ubicada en la región de Áncash, finalizará su fase de clausura el próximo año, según anunció Marco Quispe, superintendente de cierre de minas de Minera Barrick Perú. Tras participar en proEXPLO 2025, Quispe detalló ante el Instituto de Ingenieros de Minas del Perú los procesos en curso para restaurar las áreas impactadas por la extracción.
Los trabajos de cierre implican la ejecución de acciones planificadas para restablecer los terrenos intervenidos durante las actividades mineras. La culminación del post cierre se alcanzará al lograr la estabilización geoquímica de las zonas intervenidas y obtener las aprobaciones correspondientes.
Desde 1998, la mina Pierina generó 8.5 millones de onzas de oro y 20.6 millones de onzas de plata, con una planta de procesamiento capaz de manejar 40.000 toneladas diarias de minerales.
El proceso de cierre minero busca más allá de la clausura formal, y apunta a restaurar ambientalmente las áreas explotadas. Para este fin, se contempla la recuperación de la vegetación y la integración al entorno como enfoques esenciales. Quispe enfatizó la importancia de asegurar la sostenibilidad ambiental tras la actividad minera.
Este resuelto compromiso con la restauración postminera proyecta una visión de integridad ambiental y social para el futuro, demostrando el valor de una gestión responsable en la industria minera.